Ante la escasez de leche, CTEP ofrece una Súper Sopa que inventó la Universidad de Quilmes.
Ironías de un país en situación de crisis alimentaria. En el país de las vacas gordas, el supermercado Coto importa leche de Uruguay. En los últimos meses, ha comprado toneladas de leche a la Cooperativa Canaprole y las exhibe en sus góndolas. Mientras, pequeños y medianos tamberos locales, productores de leche, se funden a lo largo y ancho del país.
Según el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), en 2017 se produjeron 9.895 millones de litros de leche, un 12,5 por ciento menos que el año anterior. También cayeron las exportaciones un 24,5 por ciento. Mientras, en países hermanos como Chile y Uruguay, la producción aumentó un 7% y en Brasil, un 4,3 por ciento.
En la CTEP advertimos la dimensión de un problema que comienza en el campo y termina en los comedores populares.
“La semana pasada cerraron 1500 tambos. El sector arrastra una prolongada crisis y ahora se profundiza con este gobierno cínico que en lugar de buscar soluciones permite la importación de leche de Uruguay. Desde CTEP no podemos quedarnos sin respuestas cuando falta la leche en nuestros comedores, por eso adoptamos la propuesta de la Universidad de Quilmes, esas universidades que Vidal dice que no sirven, y ofrecemos una Super Sopa nutritiva”, expresó Rafael Klejzer Secretario General de la CTEP Capital.
El producto realizado por la universidad del conurbano bonaerense combina ciencia y bienestar social. Se trata de un alimento deshidratado en lata que reúne una importante cantidad de nutrientes necesarios para la alimentación básica de los chicos.
La CTEP Capital tomó esta iniciativa y comenzó a distribuir esta sopa en comedores populares. De esta forma, en los hechos construye un plan de política pública que el gobierno no es capaz de llevar adelante.